domingo, 21 de abril de 2019

REHABILITACIÓN DE LA CASA BATLLÓ - BARCELONA


La primera rehabilitación de la Casa Batlló la realizó el arquitecto Antoni Gaudí a partir de 1904.
Fuente: https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/c/cb/Barcelona-MansanaDiscordia-005.jpg
Imagen de la Casa original antes de la rehabilitación del Arq. Gaudí (a la derecha, rectángulo en rojo)

Con la rehabilitación realizada por Gaudí, el edificio quedó totalmente transformado según su propuesta de arquitectura modernista, promovida por la familia Batlló-Godó. La familia residía en la planta noble del edificio -principal- y alquilaba el resto de los pisos. [Nota1]
Casa Batlló Foto tomada en 1910. Fuente: https://www.wikizero.com/fr/Fichier:Entrega-fachada-22.jpg


Los herederos de la familia Batlló-Godó vendieron el edificio en 1954 a la Sociedad Iberia de Seguros, cuyo presidente era Enric Bernat. La familia Bernat, dueña de la Empresa Chupa Chups, compró el 22,5% de la compañía de Seguros Iberia, para contener sus dificultades financieras, y tomó el control en el verano de 1992.


En 1991, la filial inmobiliaria de la casa de subastas Sotheby's gestionó  la venta de la Casa Batlló, rehabilitada por el arquitecto Antoni Gaudí, señalando un precio de salida de 10 mil millones de pesetas, unos 60 millones de euros. [Nota2] 

Finalmente, debido a la falta de compradores y a las dificultades económicas de la aseguradora, la familia Bernat adquirió por 3,6 mil millones de pesetas el edificio.
Las restauraciones de 1987 fueron llevadas a cabo por el equipo de arquitectos de Josep Maria Botey, quienes se desvincularon de las obras en 1994 cuando el edificio pasó a manos de la familia Bernat, con quien ella no estuvo de acuerdo. Según el arquitecto, su propuesta de restaurar el enfoque de un museo, distinguiendo claramente las áreas de origen de las áreas restauradas, no fue aceptada. Nina Bernat dio instrucciones a Joan Bassegoda i Nonell para continuar el trabajo.
Sucesivas transformaciones de las viviendas, la planta baja y la noble, dejaron en el interior solo algunos rastros de la obra de Gaudí, se demolieron tabiques, se transformaron interiores, cielorrasos, se tiraron puertas y porticones del edificio que por entonces carecía de interés para los gustos de parte de la burguesía. La planta baja fue alquilada por empresas hasta que la Guerra Civil causó el abandono de la casa ya que la familia se mudó a Italia y la planta baja fue ocupada por la galería de arte de Syra que se cerró solo después de la muerte de su propietaria, Montserrat Isern 9 de julio de 1986 . Los laboratorios Roca de Viñals , especializados en análisis clínicos, se trasladaron al cuarto piso desde 1930 hasta finales de la década de 1980.
A finales del SXX la arquitectura de Gaudí comenzó a cobrar popularidad, hasta el punto que en la actualidad la casa Batlló recibe miles de visitantes que proporcionan a la familia Bernat millones de euros de beneficio.

Se decide intervenir en una nueva rehabilitación y restauración a partir de 2013, y en 2017 comienzan las obras que no impiden la visita de los turistas - 1 millón de visitantes al año.


El objetivo es restaurar la planta noble, recuperar partes del edificio de sucesivas intervenciones y conseguir una nueva atracción para los turistas a través de un montaje multisensorial audioguiado. 

El arquitecto Xavier Villanueva es el encargado del equipo de restaurados e industriales que intervienen en la obra: nuevas instalaciones, desde protección contra incendios, accesibilidad o climatización. En una visita guiada, nos explica que con el nuevo proyecto se pretende substituir texto por imágenes, -la gente no lee, reemplaza la lectura por las imágenes y las sensaciones [Nota3]
La nueva forma de ver y visitar los edificios emblemáticos representan un indicio de la revolución tecnológica del SXXI, El espectáculo visual y sensorial es el objetivo que reclama el público, y que le reporta a los propietarios de estos símbolos del tiempo, ganancias y beneficios mayores que cualquier otro emprendimiento donde prime la producción de bienes de consumo.


Detalle del interior de la planta noble: ventanas guillotinas que permiten la apertura total de la fachada.

María Celina López Prece


Barcelona, abril de 2019







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