sábado, 31 de enero de 2015

JEAN NOUVEL: trabajo plástico? acción violenta?

“El teatro hace
el teatro hace la diferencia
hace el paisaje con sus pérgolas cableadas
sus eternos pinos piñoneros
eternos
hace las vistas al detenerse antes de su autodestrucción
transversal,
el teatro captura el paisaje
captura las vistas
desde la histórica ciudad solo en secuencias
el teatro hace el "skyline"
desde la entrada de la ciudad
en la cuestión acerca de la historia
el teatro hace un distrito
algo que ha comenzado
y que uno no sabe muy bien cómo terminar ...
pero sobre todo
el teatro constituye una atracción
un encuentro
una encrucijada
el teatro expresa contradicciones ... para expresar
y, como Sísifo, constantemente intenta resolverlo
el teatro hace alarde de los colores de la experiencia
de la tradición
de las personas
el teatro hace una diferencia a través de diferentes caras
diferentes actitudes
diferentes entornos
el teatro sigue haciendo Perpiñán
Cataluña a través de sus colores y posiciones
el teatro hace un "rendez-vous" con diferentes culturas y épocas “

Jean Nouvel  

-traducción de María Celina López Prece-



       Jean Nouvel fabricante de formas “puras” o artificios arquitectónicos, se ha ganado una fama que le permite hacer sus performances allí dónde lo contraten, instalando su “proyecto” en grandes superficies de terreno, que le permitan desarrollar su narcisismo de artista más allá del lugar.

      Como una performance, intenta el asombro con un sentido estético fuera de toda sensibilidad vernácula, más arraigado a la gran provocación de formas y colores.

      Si en Barcelona deja su rastro en la Torre Agbar, Renaissance Barcelona Fira Hotel (Hotel de las Palmeras) o el Parque del Poble Nou y sigue … visité el Théâtre de l'Archipel que aterrizó en Perpignan.

      ¿Por qué el liberalismo económico contrata sus servicios? El efectismo de sus performances se corresponde a la coyuntura económica y política de las mega-producciones.

      No es arquitectura de revolución, sino de efectismo para que los paseantes impresionados crean en un mundo de fantasía totalmente ajeno a sus posibilidades reales.

      El poder ha dado con sus ídolos para fabricar cuentos con ladrillos.

MCLP

Barcelona, enero de 2015